Los touchpad fueron el primer paso hacia las actuales pantallas táctiles, simplemente pasas el dedo por encima de la superficie para interactuar con la interface correspondiente, pero aunque parezca una buena idea tiene sus pequeños problemas. Por ejemplo, pasar el dedo por encima de una pantalla en un smartphone supone que vas a tapar con tu mano parte de su superficie a menos que utilices este invento realizado en la Universidad de Tokio.
Te lo pones en la muñeca y la superficie de tu mano se convierte en una pantalla táctil, tan solo tienes que pasar un dedo sobre el dorso de tu mano para desplazar el puntero por la pantalla como si fuera un trackpad. El potencial de la idea es bastante interesante pero lo es todavía más desde el punto de vista de que utiliza un sistema compuesto por rayos infrarrojos, esto significa que podría utilizarse en cualquier dispositivo que se te ocurra, por ejemplo en un teclado que proyecte un trackpad virtual a un lado sobre la mesa, ordenadores portátiles, tablets, … Un curioso vídeo demostrativo detrás del salto.

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