Normalmente, encontrarás uno o varios interruptores en una pared … pero en éste caso, una pintura especial convierte a la pared en sí misma en un interruptor.
Se trata de un mecanismo electrónico combinado con una pintura especial que puedes aplicar si lo deseas por toda la superficie de una pared … cuando pasas el dedo por cualquier parte de su superficie, activas el interruptor.
Interesante, pero seguramente acabe poniendo a alguien de los nervios cuando un simple roce en la pared haga que las luces de una habitación se apaguen y enciendan cada dos por tres … lo bueno es que puedes aplicar el sistema en una pequeña zona que te interese, por ejemplo una pequeña justo al lado de la puerta donde habrías instalado normalmente el clásico interruptor.