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Es cierto que la tecnología parece que lo puede todo en estos tiempos pero hay momentos en los que hay que saber decir … no. El kissenger es algo así como un sistema de mensajería que en lugar de enviar mensajes de texto o de voz es capaz, supuestamente, de transmitir besos.

Lo conectas a tu ordenador, abres una ventana de chat y cuando quieres enviar un beso no te limitas a escribir ‘muack’ en la pantalla, sino que le das un beso al Kissenger. La otra persona tiene su propio Kissenger que, supuestamente, transmite la sensación de ser besado.

Realmente es una máquina tan extraña que seguramente te hizo gracia si la viste en The Big Bang Theory aunque eso no ha sido obstáculo para que alguien la haya convertido en un producto real. Realmente podrías pensar que se trata de un invento anti-higiénico, por no hablar de que la aplicación básica no está clara, por ejemplo, si alguien se acerca este kissenger a la cara esperando recibir un beso virtual pero tu le das un golpe con la mano ¿es una bofetada virtual? ¿seguro que la otra persona se lo puso en la cara y no en otra parte del cuerpo? Personalmente no creo que tenga mucho éxito comercial, aunque cosas más extrañas se ha visto y, sobre todo, al menos tiene gracia: