Científicos chinos han conseguido desarrollar una técnica que permite convertir orina en células cerebrales, así como suena, aunque obviamente el tema tiene una explicación lógica.
La orina no está compuesta solo por desechos, resulta que uno de los componentes que forman parte de la orina son células del hígado que acaban desprendiéndose del cuerpo. Lo que han hecho estos científicos es tomar algunas de estas células, reprogramarlas y convertirlas en células cerebrales.
Uno podría pensar que se trata de una de esas técnicas experimentales que algunos científicos llevan a cabo ‘por que pueden’ sin que tenga ninguna utilidad práctica. Sin embargo, lo curioso es que este nuevo método se presenta como un posible tratamiento para personas que sufran algún tipo de degeneración cerebral como Alzheimer o Parkinson.
Las técnicas para re-programar una célula y convertirla en algo que no es originalmente no son nuevas, todo el mundo ha oído hablar sobre las células madre capaces de convertirse virtualmente en cualquier tipo de célula.
En este caso el experimento es diferente a la vez que impactante a varios niveles: En primer lugar los científicos tomaron células de hígado de tres voluntarios directamente desde muestras de orina, luego aplicaron una técnica basada en ADN bacterial para modificar las células y convertirlas en neuronas y células gliales.
Para finalizar, utilizaron las células cerebrales obtenidas y las implantaron en los cerebros de ratas de laboratorio. Al cabo de semanas las células seguían vivas y activas.
Y esta es la historia sobre cómo la orina de un ser humano acabó convirtiéndose en parte del cerebro de un ratón. Mary Shelley habría tenido material para varios libros con eso.
No lo esperabas, pero en un futuro tu propia orina podría ser fuente de curación para algunas enfermedades. [Vía Popsci]