Ya se sabe que Cruella Deville tenía una obsesión … conseguir un abrigo fabricado con la piel de unos tiernos cachorros de dálmatas … si no viste la película ni leíste el cuento lo siento por el spoiler …
Si eres fan de Cruella pero no te gusta eso de ir despellejando mascotas por ahí, todavía puedes conformarte con éste abrigo fabricado a base de ositos Teddy Bear … incluso si se lo regalas a tu novia ecologista apreciará el detalle porque sabrá que ningún animal sufrió durante su fabricación.
Está fabricado por Sebastián Errazuriz pero seguramente no llegues a encontrarlo nunca en tiendas.