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Una de los motivos por los que, posiblemente, nunca visitaré Australia es porque es donde se encuentran los insectos más extraños y grandes del planeta. Si entiendes lo que quiero decir será porque también odias esos bichejos, pero después de ver esta historia seguramente todavía les tengas más fobia: una araña comiéndose una serpiente.

Alguien que paseaba por los bosques de Cairns, en Australia, se encontró con una araña Nephila, una araña que se encuentra en esas latitudes con un tamaño lo bastante grande como para capturar presas, inyectarles veneno para paralizarlas y luego comérsela … aunque se trata de una serpiente de varios metros de largo.

El individuo que la encontró le tomó algunas fotos y comentó a la prensa local que «la serpiente intentó varias veces levantarse y atacar la araña, pero la araña retrocedía hasta la red», «habría apostado por la serpiente, especialmente por lo grande que era», «Podía ver cómo la araña masticaba y lo que estaba comiendo se volvía negro y con burbujas». [Link, vía geekologie]