Buenas noticias para aquellos inválidos con daños en la espina dorsal: un tratamiento basado en células madre ha conseguido que un perro paralizado vuelva a caminar de nuevo.
La técnica ha sido llevado a cabo en la Universidad de Cambridge donde comenzaron probando con ratas, aunque ahora el beneficiado del tratamiento ha sido un perro que había sufrido daños en su espalda. Además, en este caso los investigadores se encontraron con un obstáculo más, porque el perro había sufrido los daños un año antes de la operación, lo cuál supone un paso adelante (nunca mejor dicho) realmente importante.
Básicamente, la nueva técnica se basó en obtener células madre de la nariz del perro para luego inyectarlas directamente en la espina dorsal. Estas células ayudaron a regenerar la zona dañada hasta el punto de que el animal pudo volver a caminar.
Según los científicos, esta técnica está cerca de poder utilizarse con seres humanos en no mucho tiempo si además se utiliza en combinación con otros tratamientos, incluso podría devolver funciones sexuales que en muchas ocasiones se pierden después de sufrir este tipo de daños.
Lo cierto es que casi parece milagrosa, más aún si echas un vistazo al vídeo de abajo donde puedes ver la evolución en el animal. Antes de la operación el perro sólo podía arrastrarse moviendo las patas delanteras porque las traseras prácticamente las llevaba colgando. Apenas 6 meses después consiguió movilidad en las cuatro patas de nuevo. [BBC, Dailymail]
Qué maravilla…