Tecnológicamente hablando, en el MIT parecen empeñados en ir uno o varios pasos por delante del resto del mundo. Lo último que encuentro que sale de sus laboratorios es un nuevo tipo de cristal fabricado de forma que tiene propiedades hidrofóbicas, es decir, que repele hasta las gotas más pequeñas de agua que puedan caer sobre su superficie.
La ventaja inmediata: si consigues unas gafas con este tipo de cristal podrías pasear por la calle con ellas puestas aunque estuviera lloviendo y tú no llevaras paraguas sin que notaras efectos de empañamiento.
Imagina este invento aplicado a ventanas de viviendas o cristales de vehículos que se verían menos afectados por los efectos de la humedad ambiental, el vaho o el agua de la lluvia. Igualmente, un material hidrófobo como este sería ideal para utilizar en dispositivos como smartphones o incluso en pantallas de televisores y monitores de ordenador.
El truco de este nuevo tipo de cristal está en la textura de su superficie repleta de formas cónicas microscópicas creada con técnicas basadas en nano-tecnología. Esta superficie con formas geométricas microscópicas crea una película protectora que rechaza cualquier gota de agua que se acerque a ella por pequeña que sea.
La forma que tiene de repeler el agua es bastante curiosa y puedes verla en acción en el vídeo de abajo. Las gotas de agua simplemente rebotan como si fueran pequeñas pelotas sobre la superficie del cristal en lugar de deslizarse sobre él hasta salir despedidas.
Como extra, el polvo y la suciedad lo tienen más difícil a la hora de adherirse a la superficie del cristal ya que las pequeñas gotas de agua, al rebotar, van arrastrando las partículas que encuentran a su paso. Por si fuera poco, también tiene propiedades anti-reflejo. De momento está en proceso de desarrollo pero parece que los cristales del futuro cercano serán así. [MIT, vía dvice]
Excelentes e interesantes noticias las que veo en su site con frecuencia, felicitaciones.