Las impresoras 2D caseras tuvieron su revolución hace años cuando los primeros modelos de impresoras caseras y baratas láser y de inyección de tinta hicieron su aparición. En ese momento las clásicas y ruidosas impresoras matriciales pasaron a ser material obsoleto de un día para otro.
La siguiente revolución que se espera en ese sentido es la llegada de una nueva generación de impresoras 3D con una relación de precio y prestaciones lo suficientemente razonable como para que cualquiera pueda conectarla a su ordenador.
En ese sentido, la Solidoodle 2 da un paso adelante convirtiéndose en un modelo con aspecto de microondas cúbico y un precio que ronda los 400 euros. Todavía caro para introducirse en masa en el mercado doméstico pero aun así ya es un precio bastante asequible para el que quiera tener una de estas impresoras en casa.
La Solidoodle 2 utiliza ‘cartuchos’ de material plástico para imprimir y es capaz de crear de la nada objetos de 15x15x15 cm. y además lo hace con bastante precisión, llegando a crear objetos relativamente complejos con bastante precisión. En el vídeo inferior incluso puedes ver cómo alguien se imprime un vaso para beber algo. De hecho, el día que estas impresoras se hagan baratas y populares quizás sea el principio del fin de las tiendas de ‘todo a 100’ y las de venta de repuestos. Mira aquí una pieza con forma de enganche para una correa:
A pesar de sus ventajas, parece que todavía les queda bastante por recorrer a este tipo de periféricos. Dejando a un lado el precio de la impresora en sí misma y del material necesario para imprimir todavía no existen impresoras multicolor capaces de trabajar con varios colores simultáneamente. Por otro lado, los tiempos de impresión todavía son largos y necesitas paciencia para ver cómo un objeto termina de crearse. [Solidoodle, gizmag]