Un código QR es un sistema para codificar información en forma de puntos de color en blanco/negro o barras. Seguramente los habrás visto en multitud de ocasiones impresos en las etiquetas de diferentes productos para indicar información diversa, pero en este caso alguien los ha utilizado como base para crear una ilustración que muchos considerarán como ‘obra de arte’ que colgar en la pared ¿algo puede no serlo hoy día?.
Dejando a un lado la polémica sobre la calidad estética de uno de estos códigos lo curioso es que funcionan realmente, es decir, puedes encargarlos de forma que codifiquen el texto que quieras. Luego puedes leer los códigos con un lector apropiado o con un teléfono móvil puedes leer los mensajes ocultos detrás de cada ilustración.
Los venden por precios que oscilan entre los 20 y los 300 euros según el tamaño y posiblemente sean parte de la decoración geek que muchos están buscando. Personalmente a estas alturas creo que ahorraré dinero comprando un marco para colocar alrededor de una mancha de humedad que tengo en la pared. [link]